una gota contiene el universo boca abajo
Manual de instrucciones: breve introducción al blog.
Hola, bienvenide.
Si llegaste acá por pura casualidad, quedate, pasá. Te cebo un mate mientras te explico cómo interpretar el desorden ordenado (sí, mi cabeza piensa que eso es, en alguna escala, orden) que anida en este blog.
No hay función apelativa. Quedate si querés. Yo te invito, pero podés decir que no. Lo que sigue son sólo palabras sueltas. Propias, y ajenas.
Tomá un mate. Y si no te gusta, un té. Y si no querés, un vaso de agua. Y una galletita. Si te vas, sin mirar nada, por lo menos no te llevás el estómago vacío.
Si llegaste acá por pura casualidad, quedate, pasá. Te cebo un mate mientras te explico cómo interpretar el desorden ordenado (sí, mi cabeza piensa que eso es, en alguna escala, orden) que anida en este blog.
No hay función apelativa. Quedate si querés. Yo te invito, pero podés decir que no. Lo que sigue son sólo palabras sueltas. Propias, y ajenas.
Tomá un mate. Y si no te gusta, un té. Y si no querés, un vaso de agua. Y una galletita. Si te vas, sin mirar nada, por lo menos no te llevás el estómago vacío.
lunes, 30 de diciembre de 2019
domingo, 15 de diciembre de 2019
tu música, tu mirada tibia,
tu sonrisa, tus inventos...
ti claridad, tus ojos tranquilos,
tus canciones, tus silencios...
el respirar pausado cuando ya no querés mas
se pierde en la espesura del agobio.
tus pupilas constantes, tu manera de esquivar
fragmentan mi cordura hasta el exordio.
tu música, tu mirada tibia,
tus caricias, tus recetas,
tu forma de amar, tus ojos atentos,
clara imagen de otro tiempo...
el respirar cansado cuando es otra tu opinión
se enciende en las manías con las cosas,
tus palabras de acero se inundan de desamor
te convertís en hielo y tus historias
se desprenden en el tiempo porque ya no existís más que en el mar de tu vacío en la memoria
tu sonrisa, tus inventos...
ti claridad, tus ojos tranquilos,
tus canciones, tus silencios...
el respirar pausado cuando ya no querés mas
se pierde en la espesura del agobio.
tus pupilas constantes, tu manera de esquivar
fragmentan mi cordura hasta el exordio.
tu música, tu mirada tibia,
tus caricias, tus recetas,
tu forma de amar, tus ojos atentos,
clara imagen de otro tiempo...
el respirar cansado cuando es otra tu opinión
se enciende en las manías con las cosas,
tus palabras de acero se inundan de desamor
te convertís en hielo y tus historias
se desprenden en el tiempo porque ya no existís más que en el mar de tu vacío en la memoria
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