Manual de instrucciones: breve introducción al blog.
Hola, bienvenide. Si llegaste acá por pura casualidad, quedate, pasá. Te cebo un mate mientras te explico cómo interpretar el desorden ordenado (sí, mi cabeza piensa que eso es, en alguna escala, orden) que anida en este blog. No hay función apelativa. Quedate si querés. Yo te invito, pero podés decir que no. Lo que sigue son sólo palabras sueltas. Propias, y ajenas. Tomá un mate. Y si no te gusta, un té. Y si no querés, un vaso de agua. Y una galletita. Si te vas, sin mirar nada, por lo menos no te llevás el estómago vacío.
martes, 8 de noviembre de 2011
y entiendo, por fin, que hay puertas que sí están destinadas a cerrarse. que no toda luz viene de una estrella.
quiero un sol, no tu foquito incandescente.
1 comentario:
Anónimo
dijo...
Y el sol llega.. pero cuando lo hace... que miedo! Casi que queremos salir corriendo a los foquitos incandescentes, que no iluminan... pero tampoco queman! Bonita!
1 comentario:
Y el sol llega.. pero cuando lo hace... que miedo! Casi que queremos salir corriendo a los foquitos incandescentes, que no iluminan... pero tampoco queman!
Bonita!
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